Para la reforma de esta cocina se pretendía dar un aire innovador, luminoso y moderno manteniendo la misma distribución del espacio.
Para conseguir estos objetivos, se planteó un diseño de mobiliario con un color neutro y claro, el blanco. El blanco brillante permite reflejar la luz con más fuerza, dando más luminosidad en todo el espacio. Nuestro elemento protagonista pero, fue el suelo, que destaca por romper con el espacio homogéneo que crean los muebles. Para la elección del mobiliario, escogimos unas sillas de estilo escandinavo para dar el toque de modernidad que nuestros clientes buscaban.